22/12/2014 | La Razon

El español Juan Miguel Callejón fue hombre clave en el partido de ayer, como ya ocurrió otras veces, pero sobre todo un valioso aporte en todo el campeonato, no solo por sus asistencias, que son la naturaleza de su juego, sino también por sus goles, pues terminó como máximo anotador, con 15.

Callejón no podía estar ausente en un partido tan trascendental como el correspondiente a la última jornada del torneo Apertura de la Liga y, después de tener algunas chances (fue él quien gestó la primera llegada, a los 2 minutos), por fin abrió la cuenta a los 46’, con una magnífica pegada sobre la marcha, después de un pase también impecable de su compañero, el ecuatoriano Carlos Tenorio.

El español siempre dijo que su meta, una vez lanzado a la punta de los más efectivos, no era la de ser goleador del certamen sino que prefería que Bolívar fuera el campeón, sin embargo a la larga consiguió ambas cosas.

Su aporte de ayer, con ese tanto para romper el cero, o con el centro perfecto para Tenorio, quien bajó la pelota de cabeza y la dejó servida para el segundo, obra de Cabrera, probablemente no le alcanzó para ser el mejor de este cotejo final, pero en el global sí hubo una figura de Bolívar fue él, porque fue determinante en varios partidos.

“Ahora nos toca celebrar por doble partida, por campeón y también por Pichichi —así le llaman los españoles al goleador del campeonato—, aunque esto último pasa a segundo plano, porque lo más importante siempre es el equipo”.

Varios de sus 15 goles convertidos en todo el torneo fueron valiosos, en algunos casos le sirvieron a Bolívar para salvar partidos complicados, incluso para lograr algún triunfo valioso.

Sí se quedó con las ganas de convertirle a The Strongest, en los dos clásicos que jugaron.

Ayer, cuando hizo el de la apertura, lo celebró porque sabía que esa era la llave para que Bolívar consiguiera una victoria y lograra —como después dijo él mismo— cerrar “un año excepcional por todo lo que vivimos”.

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