Imanol Cárdenas: ‘En Bolívar estoy yendo tras mis sueños de futbolista’

El fútbol no es su única prioridad, pues también dedica su tiempo al estudio en la carrera de Ingeniería Comercial de la Universidad Domingo Savio.

30/08/2019 | La Razon

El fútbol no es su única prioridad, pues también dedica su tiempo al estudio en la carrera de Ingeniería Comercial de la Universidad Domingo Savio.

La Razón (Edición Impresa) / Jaime Ayllón / La Paz

11:19 / 29 de agosto de 2019

En 2015, Imanol Cárdenas tuvo una destacada actuación en un campeonato juvenil en Trinidad, Beni, y su participación llamó la atención del técnico Óscar Villegas, quien le hizo la invitación para seguir su formación en las divisiones menores de Bolívar. Le fue bien, en 2018 dio el salto al primer plantel y debutó con el uruguayo Alfredo Arias y ahora ocupa la plaza de Sub-20 bajo el mando del argentino César Vigevani.

El fútbol no es su única prioridad, pues también dedica su tiempo al estudio en la carrera de Ingeniería Comercial de la Universidad Domingo Savio.

— ¿Cómo se inició en la práctica del fútbol?

— Gracias a mis padres a quienes les apasiona este deporte, mi familia es muy futbolera y desde niño tuve su apoyo y me hicieron sentir esa pasión por esta disciplina deportiva, empecé jugando en el Colegio Belgrano en Tarija, posteriormente pasé a jugar en la Asociación Tarijeña de Fútbol (ATF) en el plantel de la Escuela Municipal, luego en la de Juan Carlos Ríos y de ahí me vine a La Paz. En mi natal Tarija soy hincha de Ciclón por una tradición familiar, pero hasta ahora no pude jugar en el club de mis amores.

— ¿Y la llegada a Bolívar?

— Por una invitación del profesor Óscar Villegas, en 2015, me vio en un torneo nacional juvenil en Trinidad y se dieron las cosas para poder hacer del fútbol una profesión.

Felizmente, las cosas están saliendo bien, en 2018 me hizo debutar el técnico uruguayo Alfredo Arias, y ahora me está dando oportunidad el profesor César Vigevani.

Quiero continuar en esta actividad, la idea es consolidarme y luego pensar en emigrar como todo jugador que tiene aspiraciones de mostrar su fútbol en el exterior.

Fui convocado a una Sub-20 y ahora pienso en seguir mejorando para algún momento también tener la opción de llegar a la selección mayor.

— En Bolívar hay varios Sub-20, ¿qué hiciste para ganarte el puesto de titular?

— Es muy difícil por la competencia interna, hay jugadores buenos y con mucha jerarquía y uno como joven tiene que aprender de los referentes, escucharlos, tomar como ejemplo su día a día de entrenamientos.

En el club tenemos compañeros que se preocupan por uno como Erwin Saavedra, Juan Carlos Arce y Juan Miguel Callejón entre otros, quienes pese a que tienen todo o ganaron todo son muy humildes y te ayudan, te corrigen y enseñan. Aún debo aprender muchas cosas, para ello estoy trabajando, para aprender más con ellos y también con el técnico.

No pensé en llegar a debutar tan rápido en el primer plantel porque todo es un proceso, pero se me dio y ahora hay que sacarle provecho a ello y en especial mantener la humildad sin olvidar uno de donde viene.

— ¿Fútbol y estudio pueden ir de la mano?

— Para llegar a La Paz y Bolívar mis padres me pusieron como condición que estudiara si quería jugar al fútbol profesionalmente. Me vine el 2016 y tras llegar al internado y ponerme a órdenes del profesor Óscar Villegas busque una universidad para iniciar paralelamente la otra carrera a nivel profesional.

El fútbol y los estudios van de la mano, se puede si uno reparte bien el tiempo. Es un sacrificio entrenar en la mañana y asistir en la noche a la universidad, pero se puede si uno logra encaminar las cosas.

— ¿Por qué eligió ingeniería comercial?

— Voy a ser sincero, no me gusta mucho leer, en cambio me fascinan los números, las cifras. Desde niño estuve muy metido con las matemáticas, por eso decidí estudiar esta carrera, estoy en cuarto semestre de la Universidad Domingo Savio.

— ¿Si se presentará la situación de elegir entre la carrera universitaria y el fútbol qué haría?

— No he pensado en ello, pero pienso que tendría que hablar del tema con mis padres, pero ojalá no se presente. En el fútbol me está yendo bien y en los estudios estoy respondiendo, creo que por el momento no hay por qué pensar en elegir, sino al contrario quiero seguir creciendo en ambas cosas.

Cárdenas en un cotejo de la División Profesional. Foto: Archivo-La Razón

— ¿Cómo es un día a día con los juveniles del club?

— Acá todos se preocupan porque tengamos las mejores condiciones. La dirigencia hizo mejorar los ambientes del internado para que estemos cómodos, en lo referente a la alimentación también se preocupan por nosotros, entonces estamos tranquilos, descansa- mos bien para poder entrenar sin problemas y rendir ante las exigencias del cuerpo técnico.

Acá todos nos apoyamos.

— ¿Qué opinión tienes acerca de la formación de futbolistas en el país?

— La verdad que no hay una gran labor de formación, creo que este tema debería tener mayor atención por parte de las autoridades deportivas.

No hay una buena formación donde puedas obtener una gran base en lo relacionado a la parte táctica y a los movimientos dentro de la cancha.

Falta conocer los conceptos, no hay buena orientación en lo referente a la alimentación, creo que es una gran falencia, ahora también deben hablarte mucho con respecto a la disciplina. Creo que en esto el jugador debe ser guiado y aconsejado.

— ¿A quiénes admira en el fútbol?

— Sin duda alguna al ya retirado Juan Román Riquelme y a Toni Kroos, ambos mostraron tranquilidad en su juego con una lucidez y rapidez mental para envidiar, a todo ello hay que sumar el talento para tratar el esférico.

— ¿Cómo fue su niñez y adolescencia?

— Tuve una niñez feliz y dura a la vez, pero por la unidad de mi familia siempre hubo una sensación de felicidad.

Ya adolescente empecé a ayudar a mi familia en las tareas de viticultura. Iba a recoger uva en los viñedos, también pisaba la uva, ayudaba en la labor de maceración. Ir al campo es bonito y relajante, además es una tradición dentro la cultura tarijeña el trabajo en los viñedos.

— ¿Qué es lo que más extrañas de Tarija?

— El paso más complicado que he dado es dejar muy joven a los seres queridos, relegar las costumbres familiares.

La situación es complicada porque uno tiene que vivir solo en el internado, ya no están tus padres y llegas a formar lo que se dice que es tu segunda familia con los compañeros.

Eso sirve para madurar, para ser más responsable.

En Bolívar estoy yendo tras mis sueños de futbolista que es lo que me apasiona.

“Las opiniones.. expresadas en esta noticia son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente representan la opinión de bolivar.com.bo